El Pleno del Parlamento Europeo ha aprobado este jueves una ayuda urgente y excepcional para paliar los efectos de la invasión rusa de Ucrania en el sector agrícola y las pymes rurales que se dedican a la transformación y/o comercialización de productos agrícolas.
Esta decisión permite a los Estados miembros, que aun dispongan de fondos, ofrecer liquidez a los agricultores y ganaderos (hasta 15.000 euros) y empresas agroalimentarias (hasta 100.000) más afectados por la crisis derivada por la guerra en Ucrania. Se trata de una medida financiada a través del Fondo Europeo Agrícola de Desarrollo Rural (FEADER).
Se prevé que esta medida entre en vigor a partir del día de su publicación oficial, en base a las solicitudes presentadas antes del 31 de marzo de 2023, y los pagos deberán abonarse antes del 15 de octubre de 2023.
Para poder distribuir esta ayuda, los países que aun tengan fondos no gastados en la actual programación tendrán que modificar sus Programas de Desarrollo Rural para introducir esta nueva medida y seleccionar a los beneficiarios.
Podrán movilizar hasta un 5% de los fondos FEADER para el periodo 2021 y 2022. Esta ayuda se va a dirigir a los más afectados por la crisis actual y, en particular, a los que participen en la economía circular, la gestión de nutrientes, el uso eficiente de los recursos o métodos de producción respetuosos con el medio ambiente y el clima
La eurodiputada Clara Aguilera, portavoz socialista de la Comisión de Agricultura de la Eurocámara, ha celebrado la ayuda por la guerra en Ucrania y ha hecho hincapié en que “la guerra ha agravado la falta de liquidez en el sector primario, que se encuentra en una situación ya delicada debido al aumento de los precios, en particular, de la energía, los fertilizantes y los piensos. Esta solución, similar a la adoptada durante la pandemia, ayudará a aliviar en parte esta situación”.