Castilla-La Mancha ha sido la comunidad autónoma a la que le han correspondido más fondos de la distribución de los programas de Reestructuración de Viñedo correspondientes al ejercicio 2017. En total, 33,4 millones de euros de los 72,5 que ha repartido el Ministerio de Agricultura.
“Una buena noticia que permitirá que se pueda hacer efectivo el pago a 1.357 viticultores que ya tienen certificado su viñedo y que cobrarán antes de que termine el año”, ha asegurado el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, tras la reunión del Consejo Consultivo y de la Conferencia Sectorial extraordinaria celebrada este lunes en Madrid con las comunidades autónomas y que ha estado presidida por la ministra Isabel García-Tejerina.
Este reparto permitirá a la Consejería de Agricultura efectuar una inyección de liquidez de cara a Navidad de 12,5 millones de euros en el medio rural de Castilla-La Mancha, que se complementarán con próximos pagos en 2017 para los que están pendientes de certificar (632 viticultores) y pendientes de medir (255). De esta manera, cobrarán todos los expedientes pendientes, tal y como se comprometió el Gobierno de Emiliano García-Page.
Por último, Martínez Arroyo ha insistido a la ministra en que el Gobierno regional quiere gestionar la medida de promoción del vino para ofrecer un modelo más simplificado que facilite los trámites burocráticos a los agricultores; para lo que, de momento, se va a constituir un grupo de trabajo que estudie las propuestas de las comunidades en beneficio de las bodegas y cooperativas, según ha informado la Junta en nota de prensa.