Vicente Caja Real, responsable de ganadería de la Organización, ha defendido los intereses de los ganaderos de la serranía conquense
La Junta Rectora del Parque Natural de la Serranía de Cuenca se ha reunido en Las Majadas para tratar todo aquello relacionado con su funcionamiento y actuaciones.
Vicente Caja Real, responsable provincial de ganadería de ASAJA y vocal de la Junta Rectora del Parque Natural de la Serranía de Cuenca, ha trasladado a los allí reunidos las reivindicaciones de los ganaderos que actualmente viven de sus explotaciones en la serranía conquense.
En su turno de palabra, Vicente Caja ha hecho hincapié en las medidas que se propusieron en la anterior reunión de la Junta Rectora y que, a día de hoy, todavía no se han puesto en marcha.
En primer lugar, se ha destacado el problema de las garrapatas, parásitos que atacan al ganado y le transmiten enfermedades a causa, a juicio de los ganaderos, de la proliferación exagerada de las especies cinegéticas. Por ello, el representante ganadero, ha vuelto a poner de manifiesto la necesidad de que la Administración les compense con una vacuna antiparasitaria gratuita.
En segundo lugar, se ha reivindicado la instalación de abrevaderos funcionales, sin renunciar a una estética agradable pero que, ante todo, cumplan su función.
Por otro lado, ASAJA de Cuenca ha exigido a la Administración que actúe de forma coherente para acercar a los habitantes de la Serranía de Cuenca las nuevas tecnologías, haciendo un especial esfuerzo por mejorar la cobertura de la telefonía móvil y el acceso a una banda ancha de Internet decente.
A continuación, Vicente Caja, ha presentado otras nuevas propuestas para poner soluciones a otros de los problemas que los ganaderos de la serranía conquense padecen. El responsable de ganadería de ASAJA de Cuenca ha destacado la evidente relación entre la voracidad de los incendios forestales de los últimos años y la desaparición continuada de buena parte de la cabaña ganadera y de la población rural que la sustenta.
La ganadería extensiva realiza una labor impagable en la prevención de incendios forestales a través del control de la materia más sensible a la hora de la propagación de los mismos, como son los arbustos y los pastizales.
Por ello, el representante de los ganaderos ha reivindicado el reconocimiento de los beneficios medioambientales que aporta la actividad ganadera y, en consecuencia, la compensación económica de esta labor a través de ayudas agroambientales destinadas a la ganadería extensiva. A parte de la prevención de incendios, la ganadería proporciona un fertilizante natural extraordinario para la mejora de los suelos, ejerce una gran labor polinizadora y también ayuda a la germinación de semillas que, de no pasar por el aparato digestivo del ganado, no lo harían.
Además, ASAJA de Cuenca ha solicitado que los ganaderos no tengan que pagar los pastos en los montes públicos, además de por la labor medioambiental innegable que ejerce la ganadería allí, porque estas tasas aumentan los costes de los ganaderos, que ya están padeciendo la escasa rentabilidad de su medio de vida.
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