El certificado entró en vigor en España en el año 2001 a raíz de la crisis de las vacas locas. Este certificado establecía que todos los animales de la especie bovina, ovina y caprina destinados a matadero deben ir acompañados de un documento que recoja los datos administrativos de la empresa responsable de los animales, los datos de envío, datos sobre la explotación de procedencia y determinada información sobre los animales enviados.
En julio de 2004, el Ministerio de Agricultura presentaba un proyecto de orden para modificar este Real Decreto aunque ha habido que esperar hasta la fecha para que finalmente el Gobierno cumpliera su compromiso.
ASAJA de Castilla-La Mancha reclamó desde el primer momento su supresión, al considerar que no aporta ninguna garantía adicional a la seguridad alimentaria y supone una mayor carga burocrática, costes añadidos para el ganadero y una traba en el normal funcionamiento de la cadena comercial.
La Organización ha indicado que la desaparición de esta medida aminora los sobrecostes de producción que soporta el sector ganadero aunque, de ninguna manera, alivia la situación de crisis que ha llevado a ASAJA de Castilla-La Mancha a iniciar una serie de actos de protesta en toda la región, en demanda de medidas urgentes que garanticen la viabilidad del sector.
La Organización ha convocado concentraciones los días 15 de octubre, en Albacete; 16, en Guadalajara; 17, en Cuenca; 18, en Ciudad Real y 19, en Toledo, para terminar con una manifestación regional el día 25 de octubre, en Toledo
La Organización ha manifestado que a la crisis de precios que se viene arrastrando desde hace tiempo se ha unido este año el alza de los cereales y piensos para el ganado, en más de un 47%, lo que ha aumentado de modo considerable los costes de producción poniendo en peligro la viabilidad de muchas explotaciones.
ASAJA de Castilla-La Mancha plantea medidas urgentes como ayudas directas; incentivos fiscales, tales como la exención del IBI, la condonación de cuotas a la Seguridad Social, la revisión de los módulos del IRPF y la rebaja de la estimación directa; créditos preferenciales y ayudas para adquirir piensos para profesionales.
La Organización también aboga por el desacoplamiento total de las ayudas al pago único para el ovino, la disminución del periodo de retención, la eliminación del periodo de reconversión para ganadería ecológica, la rebaja en el coste de la retirada de animales muertos en la explotación, entre otros."
Comparte: