Reconocemos la importancia de preservar y proteger nuestro entorno natural, y nos mantenemos comprometidos con la restauración de la naturaleza en armonía con la actividad agrícola. Sin embargo, tenemos discrepancias significativas con respecto a esta ley específica y sus implicaciones para los agricultores españoles y europeos.
Los tres rechazos a esta ley en los comités del Parlamento Europeo que tienen competencias sobre el sector primario ya muestra hasta qué punto el planteamiento de la Comisión Europea ha sido divisivo, punitivo e ideológico. Así pues, la oposición a esta ley radica en la falta de equilibrio y flexibilidad en las medidas propuestas. Creemos firmemente que la restauración de la naturaleza debe tener en cuenta las particularidades de cada región y las diferentes prácticas agrícolas que se emplean en Europa.
Es importante recordar que los agricultores no estamos en contra de la restauración de la naturaleza, como se ha estado acusando desde determinados grupos y organizaciones. Somos conscientes de nuestro papel como defensores de la tierra y reconocemos la necesidad de adoptar prácticas agrícolas sostenibles que promuevan la biodiversidad y la conservación de nuestros ecosistemas. Sin embargo, consideramos que, a pesar de las enmiendas, esta ley sigue estando fundamentalmente mal preparada y seguirá siendo inaplicable para los agricultores y propietarios forestales.
Igualmente, un aspecto alarmante de esta propuesta es que carece de presupuesto, por lo que no debemos permitir que financiación de la restauración de la naturaleza venga del ya maltrecho fondo de la PAC, sobrecargado por la incertidumbre de la guerra en Ucrania, la inflación y los altos costes de materias primas y energía, así como las condiciones climáticas adversas.
En ASAJA estamos comprometidos con la búsqueda de soluciones que reconcilien la restauración de la naturaleza y las necesidades de los agricultores. Abogamos por un enfoque basado en la colaboración y el diálogo entre las instituciones europeas, los agricultores y otros actores relevantes. Asimismo, creemos que es posible encontrar soluciones equilibradas y realistas que fomenten la coexistencia armoniosa entre la agricultura y el medio ambiente.
De este modo, ASAJA y el resto de miembros de Copa-Cogeca permaneceremos vigilantes en torno a las negociaciones en los trílogos durante los próximos meses, asegurándonos de que se respete la subsidiariedad y la inclusión activa de los agricultores en la toma de decisiones que afecten directamente a nuestro sector.
Por último, queremos trasladar nuestro agradecimiento a aquellos miembros del Parlamento Europeo que han expresado su apoyo a los agricultores y han reconocido nuestras preocupaciones.