- ASAJA insta a la Consejería de Agricultura a tener en cuenta esta situación para que los afectados no sean penalizados por no poder cumplir todas las normas de condicionalidad agraria.
- La Organización solicita la flexibilización de los requisitos de los ecoesquemas de tierras de labor para que los agricultores no cobren menos ayudas de la PAC.
Agricultores de las comarcas de la Sagra, norte de Toledo y algunos municipios de la Mancha toledana han informado a ASAJA Toledo de las dificultades que están teniendo a la hora de realizar las labores de preparación de la tierra previas a la sementera, como consecuencia del mal estado de las parcelas agrícolas y de los caminos a causa de la DANA que entre el 2 y el 4 de septiembre provocó graves daños en estas zonas afectando a las tierras agrícolas.
Dos meses después del temporal todavía hay superficies de cultivo, sobre todo las ubicadas en los valles, con zonas encharcadas, acumulaciones de lodo y arena, regueros, zanjas (algunas de gran extensión y profundidad) y deslizamientos de tierras, lo que dificulta el trabajo y está provocando que los tractores y cualquier maquinaria pesada se hunda en el terreno impidiendo llevar a cabo las labores previas a la siembra, que suelen comenzar en septiembre para, posteriormente, durante los meses de octubre y noviembre, echar la simiente. Pero no solo se está retrasando la sementera. Son muchos los cerealistas que este año tendrán que dejar sin sembrar muchas de las tierras afectadas, por las dificultades que están teniendo en su acondicionamiento.
Ante esta situación, y atendiendo a causas de fuerza mayor, ASAJA de Toledo insta a la Consejería de Agricultura a mostrar empatía con los afectados y que no sean sancionados por posibles incumplimientos de las Buenas Condiciones Agrarias y Medioambientales (conocidas como condicionalidad reforzada) a las que están sometidos todos los perceptores de ayudas de la Política Agraria Común (PAC). En concreto, se solicita que se atenúen las normas relativas a la diversificación de cultivos y superficie de barbecho.
Así mismo, la organización agraria pide que se flexibilicen los requisitos de los ecorregímenes de la PAC para que los agricultores puedan cumplirlos y acogerse a ellos y no vean reducidas sus ayudas. En este sentido, considera que, entre otras medidas, se debería permitir a los cerealistas afectados dejar un mayor porcentaje de barbecho.
ASAJA Toledo recuerda que, de no poder incluir sus tierras en algún ecoesquema, los agricultores estarían siendo doblemente penalizados, ya que no solo sufrirían la merma de ingresos por falta de producción, sino que, además, percibirían menos ayudas de la PAC al no poder cumplir al cien por cien los requisitos de ecorregímenes como el de la rotación de cultivos con especies mejorantes. A todo lo anterior, habría que añadir el incremento de los gastos que están suponiendo para los agricultores los trabajos necesarios para devolver las parcelas al estado óptimo para la actividad agrícola y que pasan por limpiar, retirar lodo, rellenar regueros, nivelar el terreno y, en zonas cercanas a ríos y arroyos, retirar toda la arena que quedó depositada con las inundaciones provocadas por el desbordamiento de cauces.
Por otro lado, en municipios como Tembleque, El Romeral, que también se vieron afectados por el temporal de septiembre, agricultores con tierras dentro de la Zona de Especial Protección para las Aves (ZEPA) Mancha Norte muestran su preocupación ante las dificultades para cumplir con algunas de las condiciones para acceder al pago compensatorio para zonas de cereal con prácticas agrícolas favorables a la cría de aves esteparias, en especial con el plazo de siembra, que termina el 30 de diciembre, y que es imposible de cumplir teniendo en cuenta todo el trabajo que queda para acondicionar toda la superficie de labranza.
En este último caso, ASAJA Toledo confía en que se tengan en cuentas estas circunstancias y los afectados no sean penalizados y puedan seguir cobrando una ayuda que hace compatible el mantenimiento de zonas cerealistas de secano, poco rentables económicamente, pero esenciales por ser el hábitat natural de especies protegidas como la avutarda.
Aparte de las tierras de labor, hay que añadir que hay numerosas parcelas de leñosos donde aún se están acometiendo trabajos de limpieza y nivelación del terreno.
Para documentar y dejar constancia del estado actual de las parcelas, desde ASAJA Toledo se está aconsejando a los agricultores con dificultades para sembrar o para cumplir los requisitos de condicionalidad o de ayudas agroambientales específicas, subir fotos de sus parcelas a la aplicación de gestión de la PAC SGA@pp.
Caminos
Por último, la organización agraria urge a los ayuntamientos a acelerar el arreglo de caminos, instándoles a utilizar para ello todos los medios económicos y profesionales de que dispongan. El pésimo estado de estas vías después del temporal de septiembre, cuya situación empeoró aún más en algunos pueblos como consecuencia de la lluvia caída a mediados de octubre, dificulta y, en algunos casos, imposibilita, el acceso a las tierras agrícolas y han llegado a provocar un accidente en Casarrubios del Monte por deslizamiento de tierras, aunque, afortunadamente, sin daños personales graves. Los caminos, que no solo usan los agricultores, son imprescindibles para que se pueda desarrollar la actividad agraria de la que viven muchas familias en estos municipios.